
Los misterios del Rosario y las letanías
Misterios Gozosos
Lunes, y Sábados
Primer Misterio Gozoso: La Encarnación del Hijo de Dios
«Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la estirpe de David; el nombre de la virgen era María» (Lc 1,26-27). Después de una breve pausa de reflexión, un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. |
Segundo Misterio Gozoso: La Visitació de Nuestra Señora a su prima Santa Isabel
«En aquellos días María se puso en camino y fue aprisa a la región montañosa, a una ciudad de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. Después de una breve pausa de reflexión, un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. |
Tercer Misterio Gozoso: El Nacimiento del Hijo de Dios en el portal de Belén
«Sucedió que por aquellos días salió un edicto de César Augusto ordenando que se empadronase todo el mundo. Este primer empadronamiento tuvo lugar siendo Cirino gobernador de Siria. Iban todos a empadronarse, cada uno a su ciudad. Después de una breve pausa de reflexión, un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. |
Cuarto Misterio Gozoso: La presentación de Jesús en el Templo
«Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidarle, se le dio el nombre de Jesús, como lo había llamado el ángel antes de ser concebido en el seno. Cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarle al Señor, como está escrito en la Ley del Señor: Todo varón primogénito será consagrado al Señor y para ofrecer en sacrificio un par de tórtolas o dos pichones, conforme a lo que se dice en la Ley del Señor» (Lc 2, 21-24). Después de una breve pausa de reflexión, un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. |
Quinto Misterio Gozoso: El Niño Jesús perdido y hallado en el Templo
«Sus padres iban todos los años a Jerusalén a la fiesta de la Pascua. Cuando tuvo doce años, subieron ellos como de costumbre a la fiesta y, al volverse, pasados los días, el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin saberlo sus padres… Después de una breve pausa de reflexión, un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. |