Mi sueño en una siesta de verano (inspirado por Savater)
Leí, mientras sesteaba esta tarde de Agosto, un tweet de Fernando Savater que decía lo siguiente:
No hay educación si no hay verdad que transmitir, si todo es más o menos verdad, si cada cual tiene su verdad igualmente respetable y no se puede decidir racionalmente entre tanta diversidad.
Al verlo le doy al botón “me gusta”, pues es una afirmación con la que estoy de acuerdo; y me gusta. Después, mientras seguía sesteando, lo rumio un poco en mi coco, y me viene a la cabeza la Ilustración: hete aquí, pero si este relativismo postmoderno es consecuencia de la Ilustración; pienso un poco más, pero poco no sea fuera que me espabilara, y me digo, ¿y cómo coexistirá en su cabeza la afirmación de la existencia de una verdad que hay que transmitir y que le viene dada al hombre, con la afirmación de que la razón humana es el criterio absoluto, y no acepta que nada se le imponga? Yo, no lo sé.
Curioseo también en las respuestas que le dan a ese tweet, y hay de todo; desde las simplezas de que no hay verdad absoluta y que las religiones son todas falsas, y similares memeces. Poco pensamiento. Le sigo dando vueltas al tema y me viene a la cabeza la genialidad del cristianismo: “Al principio era el Logos”. Y me doy cuenta de la gran revelación de san Juan, que hace que la crítica ilustrada a la religión resumida por Kant en su opúsculo sobre la Ilustración, tenga poco que hacer con el cristianismo: la fe cristiana es la religión de la razón, asume la razón y la fundamenta, pues ésta no se puede fundamentar más que en la fe en Dios.
También me vino a la memoria la insistencia del Papa Benedicto en la razón. ¿Sería por esto? ¿Sería porque el cristianismo es como una respuesta anticipada a la Ilustración por su asunción de la razón? Así, si el cristianismo es racional, como se sigue del prólogo de san Juan, habría que purificar el racionalismo abriéndolo a la revelación, y no al revés, como ha sido la constante de los últimos años o quizá siglos. Y también salió un tema que me preocupa últimamente: el tradicionalismo no sería la respuesta al liberalismo que tan unido al racionalismo está. Será la razón verdadera, la razón abierta a la fe, la razón que ante su límite reconoce un Misterio que la funda. La libertad cabe en el cristianismo (y ha cabido siempre) cuando no se ha absolutizado la razón.
Estos han sido mis sueños en una siesta de verano……